vez hay que dar soluciones. Y este gobierno no da soluciones. Pretenden frenar la pandemia dando orientaciones sobre lavatorios de manos, ósculos y demás. En fin, para llorar. Nuestro gobierno nos da orientaciones caseras (de andar por casa) sobre higiene doméstica. Y pretenden que no cunda la alarma.
En nuestra opinión la Gripe A no es excesivamente virulenta, pero la percepción que se tiene es lo contrario. Si se gestionase bien no habría necesidad del caos originado.
2. Profesionales sanitarios privados: se está menospreciando el trabajo de una gran cantidad de profesionales sanitarios. Todos los que no trabajan en el sistema público. Así nos encontramos con médicos, farmacéuticos y veterinarios, que no pueden hacer nada sino derivar a los pacientes al sistema público. Y el sistema público de salud no tiene capacidad para absorber a toda la población.
Sumar el apoyo que 22.000 farmacias de todo el país pueden hacer bastante más llevadera esta pandemia. ¿O sólo nos necesitan para vender toallitas y mascarillas? Nuestros gestores colegiales están un poco parados, o al menos eso parece, porque la información recibida es mínima. Se recibe más información por parte de lo público que de los propios Colegios. Se debe exigir la vuelta del Tamiflú a las farmacias bajo prescripción médica. Esto desinflará la alarma. ¿Qué pensarían los pacientes de las farmacias cuando ante la duda los derivemos al ambulatorio? Estos pacientes no irán a la medicina privada porque no pueden prescribir el elixir contra la Gripe A. Irán al ambulatorio. El ejemplo es sencillo: si a nuestros hijos los vemos con síntomas gripales (no determinados), lo llevaríamos al sistema público. ¿Puede el sistema sanitario público español absorber, digamos al 50-60% de la población? Repito, debemos confiar en los médicos y farmacéuticos privados.
3. Retirada del Tamiflú de las Farmacias: se ha retirado el Tamiflu de las Oficinas de Farmacia. Esto genera más alarma aún. ¿Con qué fin se ha hecho?, ¿por controlar la pandemia?, ¿no existen existencias del medicamento? Si se quisiera controlar la enfermedad, se podrían usar los sistemas actuales de control sin necesidad de restringir la medicación. Si el problema es de existencias del medicamento, todavía estamos peor. Se debería haber cursado orden de compra del principio activo hace meses para que los laboratorios nacionales (públicos como el ejercito, y privados a los que les pueda interesar) pudieran tener a disposición de la población el medicamento requerido.
De paso se evitaría el comercio ilegal por internet que desde farmacias extranjeras (en el mejor de los casos) se viene realizando.
No obstante siempre está Portugal, que con receta médica dispensan Tamiflú en sus farmacias.
4. Formulación Magistral del Oseltamivir: el papel de las farmacias en la elaboración de Oseltamivir en cápsulas o en suspensión podría dar un respiro a las roturas de stock que seguramente se producirán por parte de la industria. Hasta ahora se ha omitido esta posibilidad. Todos los protocolos elaborados (con algunas incorrecciones) apuntan a las farmacias de hospital. Se ha solicitado por parte de algunos farmacéuticos la posibilidad de formular el principio activo y se les ha denegado o no se les ha contestado. Pienso que desde la entrada en vigor del Real Decreto 175/2001 de 23 de febrero por el que se aprueban las normas de correcta elaboración y control de calidad de formulas magistrales y preparados oficinales, esta solución para situaciones de emergencia es válida. Además la calidad exigida en el texto, asegura medicamentos seguros eficaces y de calidad. En el artículo 4.1.1.4 del capítulo IV de dicho Real Decreto se nos habla del suministro centralizado por parte de la Administración de las materias primas, y dice textualmente: “Suministro centralizado por la Administración: Será con carácter excepcional (excepcionales dificultades de abastecimiento)”. ¿O es que se publica este Real Decreto para después no ponerlo en práctica? Teniendo en cuenta la dosificación media (de 30 a 75 mg cada 12 horas), y la duración de cada tratamiento (5 días), las farmacias que formulasen necesitarían un suministro inicial de 5 kg. de Oseltamivir, lo que garantizaría poder preparar unos 10.000 tratamientos, cifra inicialmente adecuada si funciona correctamente la distribución de la especialidad. No olvidemos que en situaciones de prevención de la población en post-brote, se aconsejan 75 mg al día durante 6 semanas. ¿Hemos pensado en el potencial que tienen 10.000 tratamientos de oseltamivir en cápsulas? No son pocas las farmacias que formulan y tienen capacidad para preparar diariamente bastantes miles de cápsulas.
5. Colegios formuladores: pero nuestro asombro crece cuando leemos la noticia en Correo Farmacéutico de que “los colegios extremeños formularán las soluciones de Oseltamivir en polvo almacenadas por Defensa”. ¿No son las farmacias las que formulaban?, ¿dónde está el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos? ¿Apoyando a los Colegios o a los profesionales que los integran? Leemos una nota publicada en la que defiende el papel de las farmacias en la dispensación y formulación. Bravo. Según nuestras informaciones, el Consejo a consensuado este tema (la formulación por parte de los colegios) con Sanidad. Conocemos a farmacéuticos extremeños que están siendo ninguneados por sus propios Colegios. Las leyes aprobadas hasta ahora dicen que las fórmulas magistrales y preparados oficinales se elaboraran en las Oficinas de Farmacia y Servicios Farmacéuticos (se entiende que de hospital). ¿O es que los colegios son servicios farmacéuticos? En esta España de pandereta llegaremos a ver que los proyectos de construcción los elaboren los colegios profesionales de arquitectos.
Pero hay más. Cuando se habla de solución se debería hablar de suspensión. ¿Y son estos los que van a formular el Oseltamivir?
6. Protocolos de fabricación de la Agemed: tanto en los Anexos I como en el II se habla indistintamente de solución y de suspensión. Algo imperdonable para un farmacéutico elaborador de medicamentos. ¿Quién ha hecho estos protocolos?, ¿médicos, farmacéuticos, otros? Se habla de vaciar el contenido de cápsulas en alimentos edulcorados (¿existen alimentos que interactúen con el Oseltamivir? No sabe, no contesta). Esto es como cuando vaciamos alguna cápsula en el yogur del niño (volvemos a la medicina casera). Los protocolos no son excesivamente técnicos. Vemos poco rigor en los mismos.
7. Conclusiones: ¿qué debería hacerse?
· Reorientar la gestión de la crisis. Información a la población (virulencia, ventas por internet, etc.), medios (no caseros) para prevenir y/o curar la enfermedad, etc.
· Vuelta del Tamiflú a las farmacias.
· Posibilidad de que la medicina privada prescriba la medicación que estime necesaria, incluido en Tamiflú. Los casos graves se derivarían al hospital.
· Suministro de Oseltamivir a las farmacias que puedan formularlo. Se evitarían situaciones de alarma por falta de medicamento. |